lunes, 28 de febrero de 2011

¡ Qué sorpresa !







por Miguel A. Gómez Naharro

Hoy se cumplen 25 años del asesinato del primer ministro sueco Olof Palme, en una calle de Estocolmo cuando paseaba con su mujer después de salir del cine. Fue un destacado socialdemócrata europeo que reafirmó a su país en el concierto mundial. Su violenta muerte nos dejó helado el corazón a todos los que amamos la libertad y la democracia y respetamos a los políticos honestos que se comprometen con ellas y con su pueblo. Su defensa del pacifismo y de la solidaridad universal lo dieron a conocer en todo el mundo, y a los españoles –que estábamos estrenando nuestro ingreso en la Comunidad europea– nos produjo un mazazo irreparable. Criticó a los Estados Unidos con respecto a la guerra de Vietnam y a su intervención en Cuba. Lo mismo hizo con el uso de armas nucleares y con la política de apartheid en Sudáfrica. Además de lograr mayores derechos para sus compatriotas, defendió entre otras cuestiones, el derecho a la autodeterminación del pueblo palestino. En cuanto al autor del magnicidio, no ha podido acreditarse hasta ahora prácticamente nada, pues en 1988, un alcohólico y toxicómano sueco fue detenido en relación al caso, y fue absuelto por falta de pruebas. Unos se inclinan porque pudo ser la CIA o los servicios secretos ingleses, debido a que el líder sueco se destacó por luchar contra el neoliberalismo que en aquel momento desarrollaban Ronald Reagan y Margaret Thatcher. Otros proponen que lo llevaron a cabo un dirigente ultraderechista chileno -yerno del dictador Augusto Pinochet, al que éste se lo habría ordenado- o los servicios secretos de la República Sudafricana. El bisnieto del duce Mussolini, un primo hermano de la mujer del caudillo Franco, un ahijado del dictador portugués Salazar o incluso algún paramilitar cercano a la Junta militar argentina encabezada por Videla, fueron otros posibles autores que a lo largo del tiempo se han barajado como realizadores del hecho. Por lo tanto, podemos concluir que el asesino pudo ser cualquier promotor de la libertad, la democracia y la justicia social en este mundo globalizado que nos maneja. Hoy, exactamente hoy, un cuarto de siglo después, el crimen ha prescrito. No podremos saber nunca quién lo cometió ni quién fue el inductor o inductores. Luego nadie podrá ser castigado. ¡Vivir para ver!

Menos mal que –como dijo Galileo- “E pur si muove”. Últimamente el presidente norteamericano hace pronunciamientos a favor de la democracia en el norte de África y en el Próximo Oriente, y su administración dispensa portátiles para que esos pueblos organicen revueltas a través de Internet contra sus respectivos sátrapas. Incluso el señor Obama ha dicho que el líder libio Gadafi debe irse ahora. La ONU, por su parte, ha acordado juzgarle por crímenes de guerra. Ya era hora. ¡Qué pena que hayan tenido que pasar tantos años para que el mítico título de Bob Dylan “The times they are a-changin” se vaya haciendo realidad! ¡Pues, tú verás!

En este Febrero que se nos va, se han celebrado los premios Goya, de la Academia de cine de España. Conceden un premio a la mejor película europea y otro a la mejor película hispanoamericana. Con esta premisa será muy difícil que premien a una película portuguesa e imposible a una película brasileña. ¿Por qué los sesudos académicos no se plantean dar un premio a la mejor película iberoamericana en español y otro a la mejor película iberoamericana en portugués, además de mantener el mencionado premio europeo? Así, la Academia reforzaría su presencia internacional y daríamos dignidad a nuestro proverbial iberoamericanismo. ¡Ya te digo!

Otra novedad. La Real Academia de las Letras y las Artes de Extremadura acaba de elegir por unanimidad al científico y naturalista Joaquín Araújo nuevo integrante de la institución. A pesar de todos los méritos que, sin duda, atesora el señor Araújo, se hace difícil entender que el concepto científico y naturalista quepa en una academia que tiene su ámbito de aplicación y desarrollo en las Letras y las Artes.

Más academias. La de la Lengua española, que entre otras cuestiones, nos recomienda dejar de distinguir con la imprescindible tilde o acento, el adverbio sólo (únicamente, solamente) y el adjetivo solo (sin compañía, separado, sin pareja). Señores académicos, por favor, no simplifiquen tanto la vida a los estudiantes, ni a la vez, nos compliquen tan inmensamente la labor a los peones de la tiza. La próxima vez que se reúnan digan a las televisiones, (para que se enteren los estudiantes), que no es lo mismo enviar un sms que realizar una composición escrita.

La cosa Berlusconi como lo llamó nuestro admirado Saramago va camino de que lo juzguen los tribunales. Un millón de italianas han recordado la canción ‘Bella ciao’ y le han dicho al heredero de Mussolini que ya vale. La unívoca visión de los estados en Europa ha frenado que sea un millón de mujeres en cada uno de ellos, es decir, 27 millones de mujeres. Mujeres que reivindiquen a este poderoso político, que ser propietario de periódicos y televisiones no le posibilita alimentar bajos y deplorables instintos y reiterar acciones delictivas. Cavaliere, deje de anestesiar a sus paisanos varones y ¡andare a casa!

Tengo que recordar a Jokin Ceberio, un chico que víctima de lo que se conoce por acoso escolar (bullying), se suicidó. También a sus familiares y amigos. Una vida de un estudiante vale mucho más de setenta mil euros. Y sólo porque tuvo la fatalidad de tener por compañero a un dictador en potencia que quería llamar la atención y hacerse notar. Con una estrategia intimidatoria, apocó, menospreció, sometió, excluyó, amedrentó y consumió emocional e intelectualmente a Jokin. Y sólo porque éste se resistía a sus órdenes o intenciones, cumplía con su deber, estudiaba, hacía sus tareas escolares y por tanto sacaba buenas notas. Era positivamente diferente, cumplía con sus obligaciones, era responsable, y en definitiva, tenía personalidad. El tribunal ha exonerado de culpa al IES donde estudiaba Jokin. Me alegro si se lo merece. Sin embargo, en alguna ocasión, y tengo experiencia, los profesores no se enteran del proceso, y los padres tarde, porque estas acciones no interesan ni a los agresores ni a la institución escolar. Por lo tanto, ¡profesores del mundo, desuníos! Y estad alerta que estos episodios siguen ocurriendo imperceptiblemente cada día. ¡Pues eso!


Sinceramente, me alegré que la izquierda abertzale y su nueva marca “Sortu” –después de su primer comunicado de rechazo a la violencia de ETA- pudiera tener representación en sus respectivas poblaciones de origen. No obstante, también me acordé del cuento del lobo y aunque no es bueno mezclar churras con merinas, no me gustó nada que en la primera vuelta de la liga, el público de la Catedral despidiera a Iniesta con abucheos. Como defensor del estado de derecho, confío en el Poder Judicial. Siempre -claro está- que la sentencia busque que en España se defiendan las ideas democráticamente. Es decir, con los votos en las urnas. Y no, con disparos o con bombas. Si esto no queda claro, igual que se ha inhabilitado al juez Baltasar Garzón, desde aquí, pido que se inhabilite al juez Pablo Ruz. La dosis de medicamentos debemos tomarla todos igual. Y el Partido Popular no ha de ganar unas elecciones con excusas de política antiterrorista. Entre otras cosas, porque ha firmado un pacto que debe cumplir y porque lleva diciendo mucho tiempo que está de acuerdo con el gobierno en esto. O séase, tal cual.

Mis felicitaciones a la Academia Europea de Yuste al reconocer la labor de D. Javier Solana. ¡No todo va a ser joder! ¡Enhorabuena pues, señor PESC!

Para contrarrestar lo agria que ha salido esta entrega, os reproduzco la última estrofa de la mencionada canción de Bob Dylan. ¡Qué os guste el recuerdo!

Éste es el camino a recorrer.

La suerte está echada.

El lento de hoy

será el rápido mañana.

Igual que el presente

será muy pronto pasado.

El orden se desvanece.

Los últimos serán los primeros.

Porque los tiempos están cambiando.